Vienen tiempos difíciles para los grandes almacenes. Los grandes almacenes son unos formatos comerciales que han funcionado fantásticamente durante décadas. Y ahora sucede que estamos en otro escenario. Los consumidores demandan otros formatos, otras experiencias de compras.
Miren ustedes, observemos el mercado más avanzado del mundo en el retail. Hablamos, cómo no, de Estados Unidos. Ahí Amazon está creciendo velozmente. En general el comercio electrónico está creciendo. Muchos analistas indican que estos nuevos actores están “destrozando” el retail histórico, cerrando tiendas, destruyendo empleo. No es tan cierto….
Acudamos a los datos reales para entender realmente lo que ha sucedido. Obviemos las verdades absolutas. Un artículo excepcional de Financial Times nos revela la verdad:

 

Datos oficiales del Gobierno norteamericano:  donde se ha destruido empleo es en los grandes almacenes, no tanto en el resto de los sectores del retail. Pero es que llevan 15 años en caída y sin realmente reformularse.

Los grandes almacenes necesitan viajar realmente a la realidad del siglo XXI, y con las nuevas generaciones desde luego necesitan construir nuevos cordones umbilicales que les conecten con ellos. Los grandes almacenes hoy en día, en US, en Reino Unido, en Japón, en España están expulsados  de los ecosistemas de los consumidores más jóvenes.

El futuro pasa por la reformulación. Observamos algunos movimientos interesantes. Vemos claramente que la tendencia pasa por transformar las tiendas en lugares mucho más convenientes y experenciales. Y por supuesto reducir sus tamaños. Vease los últimos movimientos de Target , el gran retailers americano de grandes almacenes.

Contemplamos con curiosidad las nuevas estrategias de  Nordstrom. Está inaugurando tiendas con las que se autoexilia de lo que ha sido durante décadas. Y si analizamos el entusiasmo con lo que propagan las maravillas de este nuevo (y desconcertante para mí) modelo de tienda, uno intuye que se trata de un viaje sin retorno .

Imaginen un Corte ingles en pequeño, en conveniente, en experiencial con bares y restaurantes en esa pequeña tienda  (apenas 3.000 pies cuadrados) , con un área boutique con una selección rotativa de nuevas marcas elegantes y consultas complementarias con estilistas personales, manicura, sastres..  Pero sin inventario…..  Estamos a finales de 2017. Ahora sucede que las tiendas sin productos que poder comprar son cool. Nos dicen que el rollo va de  “showroom”, donde se ofrece hiperpersonalización .

Traduzco literalmente lo que nos dice la prensa americana:

Nordstrom Local representa el último intento de la empresa para adaptarse a los hábitos cambiantes de los consumidores…. el objetivo es crear una experiencia más atractiva que una tienda departamental de tamaño normal.

creo que nos están hablando de personalización, de hacerlo todo más pequeño, más conveniente. ¿No creen? ¿O soy yo que lo entiendo mal?

La tienda no tiene su propio inventario, pero puede recibir los artículos que desee de las tiendas cercanas en cuestión de horas. Se lo llevaremos a su casa.

Nordstrom, y el resto de los grandes almacenes cada vez venden menos en sus tiendas físicas y cada vez más en un territorio que era ajeno a ellos históricamente, el comercio electrónico. Ejemplo, en los últimos 12 meses, el 71,6% de las ventas de Nordstrom se realizó en tiendas, y el resto provino de sus operaciones de comercio electrónico.
Y muchos creemos que estos grandes almacenes norteamericanos en unos 5 años, pueden que realicen la mitad de sus ventas por internet. Recuerden que ya el mayor vendedor de moda en Estados Unidos se llama Amazon.

Fuente: Business Inside

Y gracias a eso está sobreviviendo mejor que sus grandes homologos, Kohl´s o Macy´s

Vemos cómo los retailers de grandes almacenes en Estados Unidos, en el Reino Unido, en Alemania, en Japón, lo están pasando mal. Muchos cierran tiendas este año. Fijense en Macy´s. Pero se da cuenta que  solo  conserva un promedio del 12% de las ventas de tiendas cerradas en ubicaciones cercanas y en línea.  No es algo que nos sorprenda. Los que nos dedicamos a esto, sabemos que cerrar tienda física en un área determinado, puede llevar a una disminución en las ventas, incluso en su comercio electrónico en ese área geográfico ya que la marca pierde relevancia para el consumidor, y entre otras cosas, ya no es posible realizar recogidas y devoluciones en la tienda.

Van mal las cosas para los grandes almacenes. Y todo apunta a que lo van a tener complicado en los próximos años.
Uno intuye que va a haber mucha prueba/error, pero veremos mucho showrooms, formatos mucho más pequeños y convenientes, reducción de surtidos, digitalización en búsqueda de la hiperpersonalización.
Pero por favor, en esta avalanchas de cambios (muchos necesarios), les ruego que no se alejen tanto de lo que fueron que se conviertan en una cosas irreconocible.

Autor: Laureano Turienzo